“Triste derrota ante El Toro” – Parte IV – Por: Eduardo Bechara Navratilova

Joel Lindpere, de Estonia, abre el balón hacia el costado izquierdo sobre el lateral Roy Miller, de Costa Rica. Juan Pablo Ángel pica al vacío y Miller le hace un pase largo que lo sobrepasa. La bola se pierde por la línea final para saque de meta. - ‘New York Red Bull’, entró con toda -, dice Siro.

- ‘Lets go Red Bull! Lets go Red Bull! Lets go Red Bull!’ -, grita la barra brava agitando sus banderas sobre el arquero Chris Seitz.

‘Union’ sale jugando desde su área. El equipo maneja el balón en el medio campo. La bola pasa por los pies de Fred quien se la pasa a Torres. El colombiano dribla al mediocampista que lo marca y hace un pase a Moreno por el costado derecho. El venezolano recibe el balón a mitad de cancha, se voltea y pica hacia delante por la línea de la banda, dirigiendo la bola con su pierna izquierda. Levanta la cara, busca el hueco y le hace un pase al vacío a Le Toux. El francés corre entre dos defensas hacia el centro del área, le llega a la bola sobre el punto penal y dispara un tiro rasante, sin mucha fuerza. El arquero Bouna Coundoul, se lanza con su cuerpo sobre el piso y controla el balón. El senegalés se yergue con su buzo rojo, corre hacia adelante, mira el fondo del campo y saca con un pase largo.

- ¿Vio la llegada de Moreno y el francés? -, dice Siro emocionado, los puños cerrados en sus manos.

- Ese lo hubiéramos cantado con el corazón. Lastima que le pegó tan suave -, digo negando con la cabeza. - Le faltó un poco de confianza -. Le Toux corre de vuelta, levanta su pulgar hacia Moreno. El tablero marca el minuto tres.

Dane Richards, de jamaica, pica sobre el costado derecho de la cancha, alcanza a hacerle un pase a Salou Ibrahim, de Ghana, quien para el balón de espaldas al arco, se da media vuelta y saca un tiro con la pierna derecha antes de que Stefani Miglioranzi, el defensa brasilero del ‘Union’ lo pueda marcar. El balón hace una comba buscando el palo derecho del arco. Seitz vuela con su cuerpo estirado, el brazo derecho extendido al máximo. La bola lo sobra y pasa lamiendo el horizontal. Christian Arrieta levanta sus brazos y se queja ante sus compañeros por dejarlo disparar sin marca.

- ‘Lets go Red Bull! Lets go Red Bull! Lets go Red Bull!’-, grita la tribuna ondeando las banderas. La de Colombia destacada entre ellas.

El partido se juega de forma abierta. Ambos equipos llegan triangulando para un lado y para otro. Hay un buen manejo del balón en el medio campo, lo que confirma que el fútbol que se juega en los Estados Unidos es bastante técnico.

- Se está jugando muy rápido. No hay pausa en el medio campo. Eso era lo que decía el Uruguayo -, comenta Siro.

- Yo no estoy tan de acuerdo en que se requiera una pausa. El fútbol moderno es dinámico y se juega en bloque hacia adelante.

- Cuando se va ganando hay veces es necesario hacer la pausa.

- Hoy en día prima el estado físico. Los equipos con mejor preparación física tienen una ventaja sobre los que buscan hacer la pausa -. Ángel se lleva una bola con la mano en el medio campo, la esconde y corre hacia adelante hasta que el árbitro detiene la jugada. - Es más ‘perruncho’ -, añado con una sonrisa en la boca.

Poco a poco ‘Union’ se ha ido acomodando en la cancha. - ¡Árbitro, no le des la espalda a la jugada!

- ‘Philadelphia! Philadelphia! Philadelphia!’

- ‘Lets go Red Bulls! Lets go Red Bulls! Lets go Red Bulls!’ -. La barra de ‘New York’ sigue tocando sus tambores, ondeando sus banderas.

El medio campo de ‘New York’ teje una jugada hacia el costado derecho y le pasa el balón a Brian Nielsen. El joven danés se corre hacia adelante, levanta su cabeza rubia, mide el tiro y saca un izquierdazo rasante que Seitz ataja al piso. El tablero marca el minuto diecisiete.

El partido se juega en el medio campo con fuerte marcación. Ambos equipos intentan apretar la salida y romper el juego creativo. Fred corta un avance, se la pasa a Torres. El colombiano arrastra la bola con el borde interno de su pie derecho. Dribla al mediocampista y le hace un pase a Moreno con la parte externa de su empine.

- Yo creo que ese pelado va a llegar lejos; ojalá no lo lesionen -, indica Siro subiendo una de sus cejas.

- Acuérdate que ese es uno de los grandes miedos de todo futbolista.

Los dos equipos intentan tejer jugadas ofensivas que mueren de forma sistemática en los guayos de los defensas. - Entró en monotonía el partido.

- Eso es lo que tiene que hacer el ‘Union’. Enredarle el partido a Nueva York.

- A esta altura del juego el árbitro ya tiene su cuerpo caliente y la cabeza fría. Está más acomodado a su rol, y más distante al pánico escénico que tenemos todos los jueces al iniciar los partidos.

- Lo mismo pasa con los jugadores.

Seitz saca desde su portería y ‘New York’ sube las líneas apeñuscando a los jugadores del ‘Union’ en el medio del campo. - Cuando el equipo juega al achique el árbitro debe estar muy concentrado porque es muy fácil pitar un fuera de lugar inexistente -. Siro señala con sus mano la línea que forma la defensa de ‘New York’. Fred corta una jugada y se la da sin perder tiempo a Moreno. - ¡Muy bien, Brasil! ¡Qué forma de cortar balones!

- Además de ser un gran recuperador genera ataques repentinos.

Torres para el balón con pierna derecha. Lo pisa, hace una gambeta para el lado derecho pero sale hacia el izquierdo. Se corre algunos metros y le suelta un pase rasante a Moreno. - Aquí está naciendo un Messi. ¿Viste la forma en la que se llevó el balón? -. Siro echa la cabeza hacia atrás con satisfacción.

- Es verdad, pero no hay que endiosar a los jugadores. Después se espera mucho de ellos y no hacen nada.

- Ahí tienes razón. Nosotros los latinos somos así, maduramos a los jugadores a punta de prensa -. Torres recibe un nuevo pase, intenta hacer una gambeta pero entrega mal el pase.

- Lo vi sin piernas en esa jugada -, digo inclinando la cabeza hacia un lado. - Ángel no se ha visto en todo el partido. Aunque así es él, no se ve y en cualquier momento hace gol.

- Un partido se gana con eso: un gol.

- Hoy en día todos los jugadores deben atacar y defender. Ángel sólo juega adelante. Es un ‘palomero’.


Torres dribla por adentro arrastrando la bola con la parte interior de su pie izquierdo y hace un pase templado con la pierna derecha. El balón pasa por encima de Le Toux y sale por la línea final. - Buena intensión, mala ejecución.

- El pelado maneja muy bien la zurda -, dice Siro subiendo los bordes de su boca.

- Lo más importante es que maneja las dos piernas.

- Hay que sacar un empate en éste primer tiempo. Eso le daría confianza al equipo -. ‘New York’ cobra un tiro de esquina al primer palo. Michael Orozco intenta sacarla pelo la bola queda pagando en el área, hay una melé y ‘Union’ la saca de la raya. El árbitro pita una mano a su favor y el estadio lo abuchea.

- ¡Viste! ¡Viste eso! Ese es el rugido del león -, indica Siro mirando hacia la barra brava. - ¿Sabes cuál es otro de los temores más característicos de los árbitros? -, pregunta abriendo los ojos -. El miedo a ser agredido.

Nielsen hace un pase repentino que toma a Ángel en fuera de lugar. - Luce pesado. Corre desganado. Viste que ahí no alcanzó a salir -, le digo a Siro volviendo sobre los apuntes de mi libreta -. Levanto la cara y lo veo con sus brazos en jarra.



Torres entrega otro pase mal y el técnico se toma la cabeza. Lo llama al borde de la cancha. Le indica con la mano que juegue un poco más adelantado. Vuelve al banco y habla con un jugador que se levanta del asiento y lleva el talón a sus glúteos. Estira sus cuádriceps y gemelos al borde del campo. – Piotr Nowak ya se predispuso con Torres y mando a calentar a Zimmerman -, comenta José Carbone desde su escritorio.

- ‘Lets go Red Bull! Lets go Red Bull! Lets go Red Bull!’

- Seitz tiene a toda la barra en su nuca. Debe estar escuchando el putazo desde atrás. Eso ejerce presión. Por eso hay que irse al descanso empatando éste primer tiempo -. Siro mira su reloj. - Sólo cinco minutos más.


Algunas otras jugadas de medio campo. Nielsen recibe la bola de atrás, se voltea y le hace un pase cruzado a Ángel por encima de los defensas. El colombiano para el balón con pierna derecha, entra al área, se demora un instante, dispara un derechazo cruzado y Seitz lo ataja al piso.

- Nos salvamos -, digo abriendo los ojos. - Minuto cuarenta y uno.

- Te doy la razón. Ahí vi mal a Ángel.

El arquero se levanta, toma la bola con una mano y sale jugando con Orozco, el americano la toca con Miglioranzi, éste con su compatriota, Fred. El brasilero se la da a Torres. El colombiano, la pasa de una pierna a otra frente a nosotros, esta vez dribla por la izquierda, topetea el balón hacia adelante y hace un cambio de frente hacia la otra punta. - Qué posición tan privilegiada. Que plasticidad. Que arte en movimiento -, indica Siro con satisfacción.

El árbitro sopla su silbato y los jugadores caminan hacia la entrada que lleva a los camerinos. Le Toux muestra un rictus serio al igual que Ángel. Nielsen se ve tranquilo. Torres, cabizbajo.